Monday, November 23, 2009

Be my Edward, please


Desde el adolescente arañado, lastimado y cursi que soy en realidad por dentro, debo decir que disfrute como pocos la depresión de Bella cuando Edward se va, por que así como ella, muchas veces me he sentado a ver el mundo pasar, detenida ante la miseria de mi propio corazón, en el silencio y la pausa de un sinsentido para siquiera pararme de la silla donde lloraba, o peor aún de la cama donde durante un año sin parar noche tras noche, lloré por un hombre que en su inmadurez se enamoró de mi mejor amiga y por otro que en su confusión por no saber qué hacer de su vida, se fue también y así me dejó una y otra vez aquel hombre, hombre sin nombre, que como Edward Cullen dejó a Bella Swan en New Moon, así ellos se iban de mi vida.

Y con la misma gana de buscar adrenalina de Bella, me inmiscuí en el lodo de las adicciones, para no tocar el dolor que sentí cuando él que creía que sería el amor de mi vida se fue, para siempre, y el para siempre...para siempre y por siempre se escuchaba en mi cabeza una y otra vez obsesivamente. Veía su cara y escuchaba su voz en la tristeza del eco de un cañón que se sume en la montaña sólo para repetir pensamientos y palabras, gritaba su nombre y escuchaba el eco de un silencio que regresaba a mi corazón como un puñal filoso, me curaba con una pasta y otra, pero en el rush lo recordaba y como la dosis no era suficiente, otra y otra hasta que ya no sentía nada, pero ahí, en mi cabeza, ni un kilo de barbitúricos hubieran podido borrarlo, hasta que yo quise, un día me cansé y me aventé del acantilado para dejar de escuchar, sólo que a mi en vez de salvarme un lobo, me salvó mi propio corazón al darse cuenta de lo mucho que valía y no estaba viendo.

Después llegaste tú, mi hermoso vampirito, con tus tristezas mal vividas, tus vivencias mal cerradas, con mis ganas de salvarte y de devolverte a la luz aunque te brille la piel y todos se den cuenta de quien eres, sobrevivirás porque la pasión de nuestros corazones no se encontró por accidente. Sé mi Edward, por favor. Por siempre.

‘I am a vampire, sad vampire running through your veins, give me life, no matter you are sad, your smile can cure me for a thousand years, as I find joy in dying slowly in this inmortality.‘ Soré

1 comment:

Monica Castelazo said...

...and neither you were my vampire, now I now. I´m only vampire for myself, I´m a lonely wolf walking in the night, searching for the truth and every heart that touches my heart is just passing regardless the depth of the caress. I´m alone, I´m just me, and it´s my journey, only mine, and it´s my heart, only mine, and no one will ever understand it, or share the way I see life or feel, no one... so in that truth I rest for the rest of my life and i accept to grow and mature and let go, and be finite and pure, and be here, just for today, ´cause I ain´t no vampire, I´m just a soul.