Monday, December 10, 2007

I love her, I love her, I love her, I love her


..."she loves her, she loves her, she loves her" hubieran cantado las 10 mujeres trompetistas, coristas, ensoñadoras que acompañaban a Björk si me hubieran cantado la hermosa melodía Pagan Poetry a mi, me volví a enamorar de la islandesa este sábado entre el polvo y la terrible organización de un festival que pretendió inocentemente pisarle los talones a Coachella y Glastonbury. Nada importó, ni la estupida fila para comprar una cerveza, ni el apestoso y casi medieval aroma que provenía de la zona de los baños, nisiquiera la casi hora y media de camino que hicimos desde Guadalajara para llegar a la zona del Aguacate. Björk estaba ahí con toda su magia naivé, lúdica, sui generis, genial, hermosa como sólo ella puede serlo. Por alguna razón que no recuerdo en algún momento dejé de escuchar su música porque honestamente dejé de entenderla en su disco "Medula" pero escuchar "Anchor's song" como primer acercamiento y ser la úncia estupida que conocía la letra completa en la fila de las chelas me hizo sentir que entre ella y yo había un romance especial y como por arte de magia ante la luz de las estrellas jalicienses nos reconciliabamos.

Cuando tocó "Full of love" no pude evitar imaginar que yo era un hermoso y perfecto robot creado por Chris Cunningham besándola a ella en un momento mágico musical, mi cuerpo comenzó a aflojarse y no me importaba cargar los dos vasos de chela que tenía en las manos, con tal de no volver a formarme en la nefasta e ineficaz fila que los organizadores de Sonofilia crearon para proporcionar un poco de la bebida alcohólica a los asistentes al lugar. Siguieron varios éxitos de sus discos Post, Medula y Volta hasta que tocó y el momento cumbre llegó cuando la islandesa entonó "Hyperballad" del disco Post y yo le cantaba a mi novio a la cara brincando como un duende mientras la banda ya se prendía también ante el ataque pseudo-extraterrestre de las luces laser que llegaban hacia ellos.

Hilando esta rola con Pluto, Björk repitió la petición que hace unos días hizo a los argentinos de dejar de grabarla con sus teléfonos y cámaras digitales, pidiendo así que la gente se hiciera presente en lo que ella misma llamó un "Live Concert" y no una sesión de grabación, aunque no mucha gente hizo caso, algunos si dedicamos nuestra atención completa a los shamanicos, infantiles y seductores bailes de una mujer que con total descaro conquistó un escenario ella sola, con sus 10 trompetistas y sus instrumentos musicales del futuro como el Reactable y otra mesa de luz que hace las de un equalizador en la que se controla el volúmen de las percusiones y las cuerdas, además de piñas, vasos, platos y demás objetos que se utilizaban para realizar cualquier cantidad de ruidos armónicos que le dieron un toque único e irrepetible a la actuación de la islandesa.

Los nerds fuimos felices con nuestra reina nerd, los raros nos sentimos los reyes del mundo con esta mujer que con la palabra "weird" como bandera conquistó el corazón de las más de 15,000 personas que asistimos a esta terregosa, apestosa y mal organizada reunión, en la que no podemos dejar de mencionar la actuación de MSTRKRFT que nos hizo mover los piecitos, el pobre de Jay Jay Johanson se vió opacado por la hora y lo contrastado de su música después del acto del dueto neoyorkino... salimos corriendo del lugar ante la ya drogada y enajenada banda que se quedaba en busqueda de algún duende salido del vestido de Björk, en una reunión que olía a rave malhecho pero que era evidentemente un evento multitudinario de ganancias billonarias para la casa productora Argus, ojalá que hayan aprendido la lección y para posteriores ediciones del mismo festival tengan en cuenta todos los errores humanos que deben corregirse.
Por ahora se les perdona todo por la hermosa Sra.Gudmundsdóttir.
I love you Björk.

1 comment:

ozamo said...

pues tu no te quedas atrás, escribes muy chido.

que bueno que fuiste al concierto.

abrazo del Zamo.